Siempre pensé que
serías esos ojos que mirarían más
allá de los míos
La voz que
aconsejaría sin ofender.
El silencio que
acogería mis palabras. La
mano a la que siempre me
aferraría. Pero en
sólo un instante desapareciste, dejando atrás las confesiones, las risas, los llantos, los momentos vividos, dando paso al más absoluto abandono.
Recorrimos un tramo del camino juntas pero entendí que esa amistad que compartimos debía marchar, cuando las pisadas no eran las mismas. Duele no tenerte, pero más aún dolería tenerte. Guardo tu abrazo, en el momento que te marchaste.
Delicioso.
ResponderEliminarGracias. Un saludo.
ResponderEliminarAmiga, la imagen despide una ternura inmensa...
ResponderEliminarLas palabras, sin embargo, duelen...
Y me parece que no son un mero ejercicio literario, sino que reflejan un estado de animo...
Un abrazo fuerte
Que bello texto Yolanda!! la imagen mueve diferentes sentimientos en mi interior, me gusta.
ResponderEliminarUn beso.
Anita esta imagen es toda contradicción, refleja toda la amistad del mundo, mientras al mismo tiempo y en el mismo lugar yo perdía otra. Un beso guapisima.
ResponderEliminarAntiqVa el estado de ánimo pasó, aunque ha costado pero de todo se aprende y nada es porque sí. Un abrazo gigante.
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